El entrenamiento deportivo es un proceso largo en el tiempo, que busca la mejora del rendimiento del deportista, proceso que el entrenador debe controlar, regular y programar atendiendo a unos principios o premisas: los llamados Principios del entrenamiento deportivo.
Si buscamos en la bibliografia y a través de los diferentes autores, veremos que hay un gran número de principios del entrenamiento, orientados al enfoque pedagógico, otros al biológico, etc...
El principio de individualidad hace referencia a las diferencias que existen entre los deportistas y cómo todas estas influyen en la planificación del entrenamiento, así como en los resultados.
Cada deportista es distinto y, como tal, cada entreno debe ser distinto. Por ello hay que tener en cuenta muchas cosas: situación personal, laboral, nivel físico y experiencias previas, edad, sexo, así como sus objetivos e intereses.
Aunque mi sistema de entrenamiento, teorías o creencias sean unas, debo de adaptarlas a los distintos deportistas, a sus necesidades, a sus objetivos, a su disponibilidad, intentando mejorar sus puntos fuertes y minimizar los débiles.
Puedes trabajar con un triatleta que sea capaz de correr una media maratón en 1h16', con un umbral funcional de 3'35''km. Esto daría para correr, en teoría, los 21km de un medio ironman entre 1h20' y 1h28', pero que en los 90km de bici acabe tan jodido y baje de la bici tan mal que sea incapaz de correr ni en 1h45'. Con este deportista hay que trabajar la bici, y mucho, pero sin olvidar la carrera.
*Esto esta basado en un caso real y conseguimos bajar su marca anterior en 45'
El deportista no se adapta al entrenamiento, sino el entrenador adapta el entreno a las características y condiciones del deportista, con una comunicación constante, como ya comente en otra entrada del blog.
Aqui es donde se pillan las manos todos esos entrenadores que usan el copia y pega, que es verdad que les permite llevar más cantidad de deportistas y sale más rentable. Así, cuando al IM de Lanzarote van 30 de sus pupilos o son 20 en un equipo ciclista, pues entrenamientos para todos igual, al final alguno andará.
Desde mis inicios como entrenador tengo claro que el secreto del éxito de un entrenador está en el respeto máximo a este principio, en la comunicacion con el deportista y en la formación continua del propio entrenador, ampliando sus conocimientos, medios, métodos, etc. Algo que no cambiará pase lo que pase.
Se alcanza el éxito convirtiendo cada paso en una meta y cada meta en un paso.